El niño de la foto tenía sólo 13 años cuando, el 29 de abril, desapareció durante una manifestación pacífica contra el asedio a su ciudad por parte del ejército sirio. Un mes más tarde, su familia recibió una llamada pidiéndoles que acudieran a un hospital de la zona para identificar un cadáver que podía ser el de su hijo. El cuerpo del pequeño tenía lesiones en la cara, cabeza y espalda y su pene había sido mutilado.
Cinco meses después del inicio de las movilizaciones en Siria, más de 1.800 personas han perdido la vida. Como el niño Ali H. al-Khateeb, al menos 88 personas han muerto en las cárceles tras sufrir horribles torturas y mutilaciones.
La mayoría de las víctimas son civiles 'culpables' de manifestarse pacíficamente para pedir reformas y libertad. Y la respuesta del gobierno sirio a las demandas de su pueblo sigue siendo la misma: Torturas, muerte bajo custodia, detenciones masivas... para silenciar a la sociedad.
Si aprovechamos la fuerza de los 3 millones de personas que nos apoyan en todo el mundo, podemos ejercer suficiente presión internacional para conseguir el fin de la violencia. Todo lo que tenemos que hacer es firmar esta petición y e invitar a nuestras amistades y familiares a hacer lo mismo.
Podemos cerrar los ojos para no ver lo que está pasando en Siria. O podemos decir 'Basta' y actuar.
Cuento contigo.
Esteban Beltrán
Director Amnistía Internacional – Sección Española
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