Es curioso, la primera foto nos derrite el corazón y la segunda, una vez quitada la piel y puesta sobre nosotros nos da calorcito.
No me veáis como un demonio. Lo que hago no lo hago por placer, lo hago como denuncia. Siempre nos habían sacado a esos sádicos dando machetazos en la cabeza a las crías de focas pero nunca nos habían sacado el resultado final. HIJOS DE P...
el antes y el después de una dule foquita
No hay comentarios:
Publicar un comentario