Dos niños, uno obeso

Parece que el sobrepeso y la obesidad infantil son problemas incontrolables: desde hace algunos años se llevan a cabo diferentes campañas para tratar de reducir la incidencia de estos problemas, sin embargo, los índices crecen sin parar. Hoy podemos saber, a través de un análisis realizado por SEEDO (Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad), que casi la mitad de los menores españoles tienen sobrepeso, concretamente un 44’5%. Realmente es un problema, como sabemos la calidad de vida empeora con el sobrepeso y la obesidad, poner en marcha planes más efectivos se hace prioritario, a la obesidad infantil hay que ponerle freno.

Desde SEEDO destacan que el problema afecta en mayor medida a los niños que a las niñas (un 26’7 y un 25’7 respectivamente), por otro lado puntualizan que la incidencia se agrava en aquellos niños que no desayunan, mantienen una vida sedentaria y suelen comer en casa. Son muchos los estudios que determinan la importancia del desayuno, es básico para garantizar un adecuado desarrollo, ya que proporciona la energía necesaria para empezar el día. Son varios los condicionantes que propician que casi la mitad de los menores españoles tengan sobrepeso.

El sueño es otro problema, recordemos que los niños que duermen poco tienen riesgo de sufrir sobrepeso, conclusión a la que se llegaba en un estudio realizado en Nueva Zelanda. Los expertos del proyecto europeo Ideafics nos explican que dormir 9 horas al día ayuda a prevenir la obesidad infantil, esta es una conclusión obtenida a través de un macroestudio en el que participaron 16.000 niños con edades comprendidas entre los dos y los nueve años.

Otro aspecto que influye en estos problemas es el nivel socioeconómico de los padres, como sabemos, los alimentos con más contenido en grasa, las bollerías industriales, etc., favorecen el sobrepeso y la obesidad. También hay que reseñar la falta de cultura nutricional (en los padres) como otro aspecto que favorece estos problemas, en este caso sería conveniente que de una vez por todas, el Gobierno se planteara la inclusión de una asignatura de nutrición en las escuelas.

Los expertos siguen citando causas que han provocado que casi la mitad de los menores españoles sufran sobrepeso, las horas que se pasan los niños frente a la televisión o jugando con juguetes electrónicos. Disfrutar de los juegos al aire libre como se hacía antaño contribuiría a realizar ejercicio físico, reduciendo el índice de sobrepeso, pero además podemos decir que se mejora la sociabilidad o relaciones sociales como beneficios añadidos.

Para los expertos, los resultados son preocupantes y citan un dato interesante del estudio Ideafics, en él se concluye que España, junto a Chipre e Italia, son los países que tienen un índice de obesidad infantil más elevado de toda Europa. En apenas 50 años se ha pasado de ser un problema menor cuya incidencia era leve, a ser un auténtico problema de salud a nivel nacional e internacional. Pero esta carrera no es exclusiva de estos países, el problema se repite en otros, de ello nos hablan en el artículo de Econoticias. Esto es algo que plantea realizar un cambio profundo en los gobiernos, la sociedad, la industria alimentaria, etc. Se habla mucho del problema, se realizan estudios, se facilitan datos, y las soluciones adoptadas son muy poco significativas, prueba de ello es que no se frena el crecimiento del sobrepeso y la obesidad infantil.

¿Cuánto más habrá que esperar para que se adopten soluciones efectivas?