4 israelíes muertos
380 palestinos muertos
Israel sigue con sus bombardeos mientras prepara la invasión terrestre en Gaza. La desproporción de su acción militar salta a la vista, con cientos de civiles palestinos muertos, muchos de ellos niños. Cierto que Hamás rompió el alto el fuego y que es un grupo terrorista, pero eso no justifica tanta muerte inocente. España también sufre el zarpazo terrorista desde hace decenios y nunca se nos pasaría por la cabeza bombardear las herriko tabernas, las sedes batasunas o los pisos francos de ETA. Alguno dirá que es demagogia barata y absurda, pero el argumento obedece a la lógica que aplicaría cualquier niño. El conflicto entre árabes y judíos es un pozo sin fondo y su último episodio es una consecuencia más de un largo y complejo problema. Es, como bien escribe Miguel Ángel Murado, un claro incidente dentro de un sistema. Esa maligna obviedad no justifica para nada la política de la avestruz y la complacencia de la comunidad internacional que opta, como siempre, por condenar esta barbarie a golpe de comunicados, pero cruza los brazos ante esta sangrienta Navidad que están sufriendo miles de seres humanos. Pésimo final del año y peor arranque del 2009, porque Israel seguirá salvaguardando su propio estatus de Estado judío con el frustrante anuncio de que "esto no ha hecho nada más que empezar"...
Fotos: AFP
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FELIZ AÑO... PARA EL RESTO
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