Hay algunos alimentos que resultan peligrosos para la alimentación de los gatos. Por una parte están los que directa e inmeditamente pueden afectar a su salud; por otro, están los alimentos cuya ingestión continua pueden resultar nocivos a la larga.
Entre los primeros están aquellos “bocados” que contenga huesos o espinas, pues pueden quedar atrancados en el tracto intestinal y las traqueas. Entre aquellos alimentos que pueden ser considerados dañinos con el tiempo están el chocolate, la cebolla, líquidos que contengan alcohol y el ajo.
Por ejemplo, el chocolate, por efecto de la teobromina, produce un incremento del ritmo cardíaco, estimula el sistema nervioso central y constriñe las arterias. Todo esto puede causar vómito, diarreas y hasta infartos. La cafeína también estimula el sistema nervioso y su ingestión puede provocar los mismos síntomas.
El alcohol puede sobreexitar al felino, lo que puede hacer que se vuelva agresivo. La incontinencia urinaria es otro de los efectos. La cebolla y el ajo, por su parte, son tóxicas, pues los disulfidos que contienen dañan los glóbulos rojos de su sangre.
Entre los primeros están aquellos “bocados” que contenga huesos o espinas, pues pueden quedar atrancados en el tracto intestinal y las traqueas. Entre aquellos alimentos que pueden ser considerados dañinos con el tiempo están el chocolate, la cebolla, líquidos que contengan alcohol y el ajo.
Por ejemplo, el chocolate, por efecto de la teobromina, produce un incremento del ritmo cardíaco, estimula el sistema nervioso central y constriñe las arterias. Todo esto puede causar vómito, diarreas y hasta infartos. La cafeína también estimula el sistema nervioso y su ingestión puede provocar los mismos síntomas.
El alcohol puede sobreexitar al felino, lo que puede hacer que se vuelva agresivo. La incontinencia urinaria es otro de los efectos. La cebolla y el ajo, por su parte, son tóxicas, pues los disulfidos que contienen dañan los glóbulos rojos de su sangre.
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